¿Con qué aroma definiría su infancia?
La vainilla.
¿A qué huele la ciudad donde vive?
Torroella de Montgrí, un pueblo en medio del Ampurdán, huele a varias cosas, todo depende de la dirección del viento. A estiércol proveniente de los campos cercanos, cada vez con menos frecuencia (en mi infancia no soportaba este olor, ahora lo echo de menos…). Si sopla viento de Tramuntana, llegan los aromas del Montgrí (montaña), una mezcla herbal muy sutil. Y con viento de levante se puede oler alguna nota marina.
¿Qué le impulsó a ser nariz?
La curiosidad, al descubrir en mi tesis de fin de carrera que las hormigas se comunican a través del olor. Los humanos nos comunicamos con el habla, los gestos, la mirada… y el olfato lo tenemos más olvidado. Me fascinó saber que un insecto tan pequeño tiene desarrollado un sistema comunicativo tan complejo. Su “alfabeto” son las feromonas que mezcla para crear mensajes olfativos que son recibidos mediante las antenas o las patas. Siempre digo que ellas son pequeñas narices, pero ¡sin nariz!
¿Cree que es un oficio con futuro? ¿La IA podrá llegar a crear alta perfumería?
Si haces tu trabajo con ilusión, le dedicas tiempo y disfrutas con él, sea cual sea el oficio, creo que tiene futuro. En todo oficio, pero, es importante adaptarse a los gustos y a las nuevas tecnologías. La inteligencia artificial será de gran ayuda en el mundo de la perfumería, pero creo que nunca podrá suplantar al 100% a una nariz humana. Será una herramienta muy importante y creo que será bueno aprovecharnos de ello.
Mi ilusión sería poder ver y oler cómo los aromas son transportados a través de canales como la televisión, radio, ordenadores, móviles, etc. Una utopía, que quién sabe si algún día será posible.
Si la creación de un perfume es un arte, ¿con qué otro artista, quizás de otra disciplina, le gustaría colaborar?
Ya desde nuestros inicios he colaborado con artistas de otras disciplinas, por ejemplo, Raúl del Sol, ilustra nuestros perfumes con un trazo exquisito. Otras colaboraciones más anónimas son nuestras tazas de cerámica, para poder oler mejor nuestros perfumes, realizadas a mano.
Además, algunas de nuestras obras rinden homenaje a artistas que han marcado mi trayectoria, muchos de ellos artistas del movimiento dadaísta: Yves Klein, Marcel Duchamp, Juliette Roche, etc.
Mencione un clásico que usted considere un referente o su referente.
Es difícil escoger uno… pero una de las joyas que tengo en mi colección personal es L’Heure Bleue de Guerlain (extracto de 1912). No solo por su aroma, también por su packaging. Fue mi primera pieza de colección.
¿Por qué es una buena estrategia consolidar las fragancias clásicas?
Tenemos que aprender del pasado para obtener un futuro mejor. Pero, ¿qué es una fragancia clásica? Según la definición, es clásico lo que debe tomarse como modelo por ser de calidad superior o más perfecto. Hay creaciones modernas que ya son un “clásico”. A mi forma de ver, cada uno tiene sus clásicos, y tomarlos de referente, reinterpretarlos o modernizarlos es una tarea divertida y muchas veces un reto, ¡siempre y cuando no se copie!
¿Qué perfume de los lanzados en 2019 ha captado su atención y por qué?
Cedar Forest, de Ponsà Barcelona, un perfume muy seductor, con ingredientes 100% naturales. Él mismo diluye el absoluto de musgo de roble. Muy interesante.
¿El interés por la sostenibilidad y la ecología marcará las nuevas tendencias en creación de perfumes?
Claramente ¡SÍ! No solamente en el packaging exterior, también en los ingredientes. Los humanos tenemos que cambiar nuestro método de “consumo rápido” y empezar a respetar más la naturaleza y los animales.
La industria del perfume y la cosmética está creciendo a un ritmo demasiado rápido, y eso conlleva a una gran demanda de muchos ingredientes, sobre todo de bajo coste que se traduce a una desforestación imparable (por ejemplo, el aceite de palma). A eso hay que sumar el cambio climático que está afectando ya a muchas plantas e insectos. Es importante dar una segunda vida a los materiales, por ejemplo, los tapones de madera de nuestra colección Primal Waters, son los restos de las podas de las ramas de los avellanos de Sant Hilari, un pueblo cerca de nuestra sede. Dar una nueva vida a las materias, seleccionar materiales con certificados ecológicos y controlar que sean de Comercio Justo, creo que son clave para preservar el planeta.
¿Cuál cree que será el ingrediente más destacado de 2020?
No sigo las tendencias del mercado... ¿Pachulí?
¿Qué fragancia lleva puesta ahora mismo?
Hoy estoy utilizando una nueva creación, de la que no puedo desvelar aún el nombre. Solo puedo decir que es un perfume verde/floral.