Ela Paproska nació en los años 50 en Varsovia (Polonia), hija de un arquitecto y una pintora vanguardista. De joven, ejerciendo de monitora de esquí, sufrió quemaduras severas en su rostro. Viajera incansable, conoció en Nueva York a un prestigioso científico del Instituto Weizmann, que desarrolló un ungüento con la intención de acabar de curar la piel dañada de su rostro. El suero demostró ser casi “milagroso”. Años después, el destino llevó a Ela Paproska hasta Israel donde encontró la sede de Instituto Weizmann y decidió retomar una idea recurrente: recuperar esa fórmula que la curó y ofrecerla como cosmético, revisado y actualizado con la última tecnología.
¿Fue el accidente lo que la llevó a crear la marca Ela Paproska?
Tengo un carácter inquieto, siempre me ha gustado experimentarlo todo y aprender continuamente. El accidente que tuve fue la chispa que prendió la mecha de la inquietud para crear mi marca de cosmética. El incidente fue a los 25-26 años. Era mi primera temporada como monitora de esquí, no tenía experiencia ni información sobre los riesgos del sol. Y con esa edad parece que lo sabes todo y no te puede pasar nada. Pagué el peaje: me quemé el rostro y me quedé ciega durante tres días. Me desesperé completamente. Cuando recuperé la visión y me vi el rostro... Las heridas tardaron casi un año en cicatrizar. Me dejaron bastantes secuelas. La piel tardó casi siete años en recuperarse del todo. Me quedó alguna cicatriz y algunas venitas rojas. Como tengo un carácter optimista, no me preocupó. En Estados Unidos, por casualidad, conocí al padre de un amigo que era un científico, miembro del Instituto Weizmann de Nueva York. Él me hizo un preparado que me recuperó la piel en menos de tres meses. Me desaparecieron las cicatrices, y cualquier marca que pudiera haber quedado. Estaba en el séptimo cielo. Se me ocurrió la idea de “popularizar” la fórmula y aplicarla en cosmética, hacerla accesible a todo el mundo. Era joven, y las ideas con esta edad van y vienen. Primero quise viajar por el mundo: Estados Unidos, Europa... Sin embargo, cada cierto tiempo me venía a la cabeza. Viajé por todo el mundo; en una ocasión llegué a Israel y me di cuenta que “la joya de la corona” en investigación allí es el Instituto Weizmann. Me vino a la memoria, otra vez, el padre de mi amigo que me curó el rostro y entonces tomé contacto con la gente del laboratorio. Conocí a muchas personas y poco a poco formé un grupo de amigos y científicos. Les comenté mi experiencia pasada y empezamos a investigar cómo podría ser la anterior fórmula; conocía algunos ingredientes: urea, salvia, rosa cañina. La ciencia progresa, así que teníamos que buscar unos ingredientes con unas propiedades muy parecidas a esas pero mejoradas y puestas al día. Poco a poco, creamos la marca Ela Paproska.
La firma se compone de dos líneas: Renai-Science y Vivid Solutions. Háblenos de ellas.
Ambas líneas están enfocadas hacía el mismo objetivo: regular el propio funcionamiento de la piel, para que con el tiempo sepa defenderse como si fuera joven. Sobre todo, actúan en la capa de matrix, entre la dermis y la epidermis, que hace de “colchón”; cuando esta capa se debilita, impide la fabricación de colágeno y elastina, que otorgan la frescura y la elasticidad a la piel. Las dos líneas son para todo tipo de pieles, salvo las acnéicas, que requieren otro tratamiento. Y son tanto para hombre como para mujer.
La diferencia entre ambas es, que la línea Vivid Solutions se utiliza cuando no hay problema de flacidez y la Renai-Science incide de forma enérgica en las pieles más secas y flácidas, que habitualmente aparece en las más maduras. Esta última, además, tiene como ingrediente las fitohormonas vegetales, sobre todo las que provienen de la soja. Los fitoesteroles que extraemos de ésta, impiden la actuación de las enzimas de metaloproteinasas que desequilibran el funcionamiento de las células de la piel e impiden la fabricación normal de colágeno y elastina.
La eficacia de los resultados viene avalada por centros de investigación de prestigio internacional...
Las pruebas han sido realizadas por laboratorios independientes: Skin Research Institute (Israel), Dermatest (Alemania) y Biovitrum (Suecia) y los tres confirman la gran eficacia de los productos testados.
Ela Paproska ha creado el concepto de “Cosméticos Hidrocomposite”. ¿Qué significa?
Cuando hay dos materiales de diferentes características y se funden el uno con el otro, resulta un tercero, un “composite”, con otras propiedades que no tienen que ver con los dos primeros materiales. Nosotros hemos creado el “Hidrocomposite” porque está formado a base de agua: la depuramos, la presurizamos a alta velocidad y temperatura adecuada incorporando el sistema Venturi, que la oxigena, quedando más esponjosa. Este proceso provoca una reacción de fusión de varios ingredientes. Aunque nuestros cosméticos pueden tener algunos componentes como otros, la formulación es diferente. Es como cuándo se hace un pastel: todos sabemos lo que lleva, pero si cambiamos las cantidades y la forma de hacerlo el resultado puede ser muy diferente. Con nuestro sistema de presurización, el agua de Mar Muerto se convierte en el vehículo de los ingredientes activos, que permite la total fusión de los mismos, creando los “hidrocomposites” y que actúan a más profundidad, mayor intensidad y ofrecen extraordinarios resultados.
Ela Paproska es una de las primeras de cosmética en el mundo, que no utiliza parabenos, que son a menudo la causa de alergias en la piel.
El lema de la firma es “Nourish your senses” (Nutre tus sentidos), donde el aspecto sensorial cobra mucha importancia...
Evidentemente. Primero, abrimos la caja que contiene un producto de Ela Paproska. Vemos el interior, completamente diferente de la de otros tratamientos. Visualmente nos atrae. Hemos cuidado muchísimo todos los detalles. A continuación, sentimos que el tacto del frasco es muy agradable y distinto. Además, es muy sencillo, minimalista. Hemos diseñado una línea zen y según la opinión de mucha gente: muy elegante. Las texturas de nuestras cremas son increíbles gracias a la tecnología “hidrocomposite” exclusiva de Ela Paproska.
¿A qué se debe su relación promocional con Porsche?
Hemos establecido una buena alianza con Porsche. La casa se interesó por nuestros productos. Poco a poco, nació una amistad y un vínculo de colaboración: nuestra presentación oficial la hicimos en el centro Porsche de Hospitalet de Llobregat (Barcelona). La central alemana también estuvo presente y nos brinda su apoyo. La marca tuvo la idea de lanzar el lema “Ela Paproska, el Porsche de la cosmética”.
¿Cuál es su estrategia de distribución?
Desde diciembre del año pasado nuestros productos se pueden adquirir en España y Andorra en Perfumerías Júlia, gracias a un acuerdo al que hemos llegado. En un futuro inmediato incrementaremos nuestra presencia en el mercado español siguiendo nuestra política de expansión, eligiendo siempre perfumerías muy selectivas. Hace poco estuvimos en San Sebastián, donde presentamos la marca junto al prestigioso cocinero Martín Berasategui, que a su vez presentaba un torneo de “Golf and Chiefs”, que tendrá lugar en el mes de mayo en la Moraleja. El marketing directo con los clientes nos interesa mucho, porque es una marca muy exclusiva que quiere compartir su exclusividad con sus clientes potenciales.
¿Tienen pensado expandirse a nivel internacional?
Estamos estudiando posicionarnos en EE.UU y Asia. También en Suiza, Francia y Rusia.
¿Han establecido ya algún otro acuerdo aquí, en España?
Estamos en contacto con varias perfumerías. El problema en este momento es que todas coinciden en lo mismo: no entra gente. Nosotros hemos elaborado una estrategia de marketing que permite vehicular los clientes hacia las tiendas; siempre escogemos las perfumerías más exclusivas de cada zona. La única condición que pedimos es que dispongan de cabina para llevar a cabo una o dos veces al año los tratamientos de Ela Paproska. Esto nos permite convencer a las asesoras de belleza de que el producto realmente funciona. Nuestros clientes, que han tenido la ocasión de probar nuestros tratamientos compran, vuelven y repiten.
Ela Paproska se posiciona en un target muy definido de mercado.
Nuestro target es clientela muy selectiva dado el alto precio de nuestros cosméticos. Por este motivo y dado que nuestros productos son nuevos en el mercado pensamos que con las acciones directas es con las que obtendremos los mejores resultados.
Ya llevan varias acciones de este tipo. ¿Han tenido éxito?
Estamos convencidos, que con nuestra estrategia de marketing hemos creado un tránsito de algunos miles de clientes de alto nivel hacia las perfumerías, que distribuyen Ela Paproska. Perfumerías Júlia son establecimientos con una atención muy especial al cliente y las consejeras son de gran importancia.
¿Cómo ven el futuro?
Queremos aumentar la familia de las dos gamas, con algunos productos básicos como tónicos, leches limpiadores, etc, pero sin marear al cliente. Poco a poco iremos presentando nuevos productos, algunos están terminados y a otros les falta muy poco. Asimismo, tenemos preparada otra gama, aunque no la vamos a lanzar en un futuro muy inmediato. Queremos primero consolidar las dos actuales líneas de Ela Paproska que ya están presentes en el mercado español. VPC
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