Stanpa, a través de su Fundación, pone en marcha el Plan de Ayuda a las Peluquerías para contribuir, de forma directa, a los esfuerzos para la recuperación de la normalidad de los 15 municipios valencianos más afectados por la DANA.
La fase preliminar del proyecto se centra en respaldar al tejido comercial local de los municipios afectados, ya que la mayoría de los salones de peluquería consisten en pequeños comercios, negocios locales y autónomos. Esta primera etapa del Plan de Ayuda cuenta con un presupuesto inicial de 140.000€ y pretende apoyar a más de medio centenar de establecimientos que recibirán mobiliario y equipamiento profesional imprescindible para su actividad.
Detrás de este Plan está el compromiso de la Fundación de la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética, que coordina la puesta en marcha y la gestión de las ayudas junto a estas primeras compañías, miembros del Comité de Peluquería Profesional: Goldwell, Henkel Consumer Brands Professional, KIN Cosmetics, L’Oréal, Montibello, Revlon Professional, Salerm y Wella.
Esta iniciativa se suma a las acciones de apoyo que otras muchas empresas de la industria cosmética, desde el principio, han llevado a cabo, como donaciones, eliminación deuda y facilitando apoyo emocional a los profesionales y sus equipos, entre otras.
Durante la preparación y lanzamiento del Plan, Stanpa ha estado en coordinación constante con la Cooperativa de Peluqueros de Valencia, que representa a los negocios locales de la zona, atendiendo a sus necesidades y logrando la mayor coordinación posible con este colectivo. De esta manera, las peluquerías beneficiarias podrán acelerar su vuelta a la normalidad, reduciendo de forma significativa sus costes en equipos básicos como sillones de corte, lavacabezas, tocadores, secadores, peines, tijeras, máquinas de corte, planchas o carros.
“Estamos muy orgullosos de la solidaridad del sector, que una vez más se une de forma generosa para un plan de apoyo colectivo a las personas afectadas por la dana, en este caso reconociendo la situación de vulnerabilidad de los peluqueros y peluqueras, trabajadores autónomos en su mayoría, cuya forma de vida depende de la reconstrucción de su salón para poder desarrollar una profesión que aman y que sirve a la sociedad a recuperar su normalidad”, ha comentado Val Díez, directora general de la Fundación Stanpa.
Las peluquerías han demostrado ser un elemento fundamental para el bienestar de las personas, especialmente desde la pandemia de la COVID-19, cuando su labor como servicio esencial se vio respaldada en la prioridad de sus reaperturas bajo las estrictas condiciones que exigía el momento. En este sentido, Óscar Mateo, coordinador del Plan de Ayuda a las Peluquerías, ha manifestado que “esta primera fase viene a dar respuesta a las necesidades más acuciantes en los 15 municipios más afectados, con la que pretendemos ayudar unos 50-80 salones, pero el Plan tiene vocación de aportar soluciones adicionales gracias al contacto continuo con la Cooperativa de Peluqueros de Valencia y otras organizaciones vinculadas con la peluquería”.
Los 15 municipios priorizados en esta primera fase son: Alaquàs, Albal, Aldaia, Alfafar, Algemesí, Beniparrell, Benetússer, Benimamet, Catarroja, Chiva, Massanassa, Paiporta, Picanya, Sedaví y Utiel.