Desde el 1962 Deborah Milano quiere aportar más que belleza a través de sus productos de maquillaje, mediante la influencia de las últimas tendencias de moda o de diseño. Durante los últimos 18 años, la marca ha colaborado de manera local e internacional con artistas para crear “objetos de diseño” que han sido el centro de atención: productos de maquillaje que juntan alta calidad con un packaging icónico y atractivo. Este año se ofrece una nueva colección única, cuya inspiración ha sido la imaginería de Keith Haring, el artista que simboliza la cultura urbana del Nueva York de los años 80.