De acuerdo con las últimas estimaciones, la cantidad de datos digitales creados o replicados a nivel mundial se ha multiplicado por más de treinta en la última década, pasando de dos zetabytes en 2010 a 64 zetabytes el año pasado. Pero esta cantidad no es nada en comparación con lo que se espera en los próximos años. Según las previsiones, el volumen de datos generados en todo el mundo superará los 180 zetabytes en 2025, lo que supone un crecimiento medio anual de casi el 40% en cinco años. El auge del IoT (Internet de las Cosas), el desarrollo de la 5G y las redes sociales son los principales impulsores de este "Big Bang" de los datos.
Ante el fuerte crecimiento del volumen de datos, no cabe duda de que su gestión es todo un reto. De hecho, los expertos alertan de que la creación y replicación de datos crecerá a un ritmo más rápido que la capacidad de almacenamiento instalada. En 2020, la capacidad mundial de almacenamiento (base instalada) alcanzó los 6,7 zetabytes, y se prevé que crezca una media de casi el 20% anual durante el periodo 2020-2025. En la actualidad, sólo un pequeño porcentaje de los datos recién creados se está almacenando: menos del 2% de los nuevos datos generados a lo largo del pasado año se ha guardado y almacenado hasta 2021.