Estas navidades, coincidiendo con su 40 aniversario en el mundo de la moda, Carolina Herrera lanza sus ediciones de coleccionista: GOOD GIRL y BAD BOY SUPERSTARS. Dos nuevos frascos inspirados en el glamour del Hollywood de los 80 y en aquellas fabulosas noches de estudio 54. Un canto de amor al espíritu de Nueva York y a su vida nocturna.
Carolina Herrera sube la apuesta con Superstar Collector’s Edition, un tour de forcé que une por primera vez en una edición limitada sus dos iconos: Good Girl y Bad Boy.
Listas para convertirse en estrellas del rock, ambas fragancias vienen en un frasco plateado de diseño único. Mientras el legendario stiletto de Good Girl luce sus mejores galas con un acabado brillante y chispeante, el relámpago eléctrico que define el universo Bad Boy da un paso más allá y estrena diseño con un frasco cromado y reflectante. Carolina A. Herrera, directora creativa de fragancias de la casa, define estas novedades como “sensualmente recubiertas de energía deslumbrante para celebrar la confianza que da el estrellato”.
La plata siempre ha sido una fuente de inspiración para la superstar más brillante de todas, la propia Carolina Herrera. Desde su primera colección en 1981, la diseñadora de moda ha entonado un canto de amor al glamour del Hollywood clásico a través de materiales metálicos. De hecho, ella misma aparece envuelta en estos tonos en muchas fotografías fascinantes tomadas durante aquellas fabulosas noches de Studio 54. Para el director creativo Wes Gordon, estas imágenes y tejidos forman parte de su visión narrativa, en la que captura el espíritu de Nueva York y su vida nocturna y lo traslada al siglo XXI.
La campaña visual reúne a las dos personalidades que ponen rostro a las fragancias, y cuyos caminos se entrecruzaron por primera vez en el film original de Bad Boy. La infinitamente enigmática Karlie Kloss vuelve a personificar el espíritu Good Girl con un vestido tan llamativo y sexy como el propio frasco del perfume. Como afirma Wes Gordon, “La mujer Herrera es audaz, tiene seguridad en sí misma y siempre es la más hermosa de la sala”. Con su chic rockero, Karlie Kloss desprende magnetismo en este vestido que es una declaración de intenciones y ha sido especialmente creado para la campaña.
El actor Ed Skrein y su mirada irresistible aportan un contrapunto teatral irradiando glamour hollywoodiense, aire cool y elegancia natural.
Juntos, encarnan la dualidad que ha hecho famosas a ambas fragancias. La yuxtaposición de notas e ingredientes tan vibrantes como la plata evocan olfativamente el delicado juego entre el bien y el mal, la luz y la oscuridad. A la hora de crear estos perfumes, los perfumistas Louise Turner y Quentin Bisch se inspiraron en la fascinante dualidad de la mujer moderna y en la rebeldía llena de luces y sombras de la naturaleza del hombre de hoy.
La fragancia para mujer viene presentada en una glamourosa caja plateada con estampado de cebra, mientras que la de hombre opta por un estampado Art Deco clásicamente masculino. Por primera vez, las fragancias establecerán un vínculo con la colección Carolina Herrera Make- Up. Una barra de labios especial estará disponible en puntos seleccionados, añadiendo un poco más de emoción festiva a la ecuación.
Subrayando el espíritu de Good Girl y Bad Boy, Carolina Herrera consolida su posición de vanguardia en el mundo de la perfumería con una edición para coleccionistas creada para evocar un estado de ánimo festivo y recordarnos que todos somos Superstars.