Serge Lutens es un maestro perfumista. Su larga trayectoria le ha otorgado ese título, que también significa superación, creatividad, trabajo duro... y genialidad. El perfume concebido como obra de arte, como emoción y sentimiento, como algo más que un mero aroma o un complemento de moda. así son las fragancias de un creador que nos confiesa que escapa a marruecos para “desintoxicarse” de Europa, que ve más allá del sexo femenino y masculino y que no define el concepto de belleza porque es “infiel, cambia según nuestra percepción del tiempo”. L’Orpheline es su nueva obra.