“Toda nuestra experiencia en la parte química en los textiles es muy sinérgica con la cosmética”
AITEX nació como la Asociación de Investigación de la Industria Textil en 1985, pero en 2018 crearon la Unidad Técnica de Cosmética, ¿qué les impulsó a dar este paso?
AITEX empezó a trabajar con empresas del sector cosmético hace unos 9 años y creó en 2018 la Unidad Técnica de Cosmética como respuesta a la fuerte demanda por parte de las empresas para obtener servicios con total garantía en el ámbito de los controles de calidad e I+D.
¿Cuáles son los objetivos y los logros de esta Unidad Técnica Cosmética?
La apuesta de AITEX por la cosmética se inicia en 2015 cuando empezamos a realizar los primeros proyectos de I+D con empresas relevantes del sector. En 2018 creamos la Unidad Técnica de Cosmética dotándola de técnicos cualificados y de equipamiento con importantes inversiones de laboratorios y plantas experimentales de I+D para cosmética planificadas anualmente, realizadas con fondos propios. En 2020 entran a formar parte del Consejo Rector de AITEX empresas del sector cosmético. Las actividades del Instituto en este campo han evolucionado notablemente adaptándose a las demandas del mercado y a las necesidades de las empresas. Los proyectos se han focalizado en el uso de las tecnologías más punteras que cumplen con los requisitos para ser aplicables a la industria generando soluciones de alto valor añadido.
Desde el departamento de I+D se apuesta por la investigación basada en los compuestos naturales, con la intención de reducir aquellos compuestos químicos, que puedan ser foco de discusión por su seguridad con el usuario final, por otros más naturales, tales como pueden ser la modificación de conservantes por aceites esenciales. También se están desarrollando nuevas fórmulas y métodos de encapsulación de activos para protegerlos de factores externos y aplicarlos a diferentes formulaciones o a cosmetotextiles.
Actualmente, se encuentra emergido en proyectos centrados en toda la cadena de valor partiendo de la búsqueda de nuevos ingredientes activos, siguiendo en su procesamiento por métodos tecnológicos como la extracción y su estabilización mediante encapsulados, y finalizando en el estudio y desarrollo de nuevas formulaciones con ingredientes naturales con el uso de los formatos más punteros como son los productos waterless.
¿Qué diferencia a AITEX de otras asociaciones de la industria cosmética?
La principal diferencia, de la cual nos gusta hacer eco, es la calidad, calidad y calidad. Tanto en el trato con los clientes, mediante la proximidad y la rapidez en la entrega de los resultados de los ensayos como en capacidad de abordar los problemas de los clientes y tratarlos como propios para dar una respuesta de calidad. El instituto AITEX cuenta con más de 35 años dando servicios de laboratorio a diferentes sectores que nos otorgan un amplio y gran know-how que se quiere trasmitir a las empresas para su beneficio. Hay que tener en cuenta que toda nuestra experiencia en la parte química en los textiles es muy sinérgica con la cosmética.
AITEX juega un papel relevante que abarca toda la cadena de valor. Por un lado, en la investigación de nuevos desarrollos abarca desde el proceso de obtención de nuevos activos, hasta el desarrollo de productos finales, incluyendo el estudio de escalabilidad para valorar la viabilidad industrial y su transferencia a las empresas. Por otro lado, dispone de ensayos de laboratorio que permiten certificar la eficacia y seguridad del producto, destacando los test de usuarios con supervisión médica, que permite verificar y guiar los avances hacia productos de alto valor añadido.
Asimismo, AITEX ofrece la ejecución de proyectos de I+D bajo contrato con empresas en régimen de confidencialidad, así como en asesoramiento sobre las posibles convocatorias de ayudas públicas para las empresas para este fin en los ámbitos nacionales y europeo.
¿En qué medida está afectando a la industria cosmética el interés creciente del consumidor por la sostenibilidad? ¿Qué está obligando a cambiar?
Las nuevas tendencias se están redirigiendo hacia la búsqueda de lo natural para aportar a sus clientes productos que les acrediten bienestar y hagan alusión a la protección del medio ambiente. Para ello, han surgido tendencias como el upcycling, focalizado en la revalorización de los residuos y subproductos agroalimentarios en el sector cosmético.
Intereses que se encuentran reflejados en números, siendo que un 25% de los consumidores españoles muestran un gran interés en el uso de recursos que de otro modo habrían sido descartados. Estos recursos abren un amplio campo de aplicación considerándose materias ricas en compuestos activos multifuncionales que, mediante un correcto desarrollo, son capaces de sustituir los ingredientes químicos de las formulaciones e incluso actuar como sustitutos de los microplásticos.
Una situación, que a su vez viene acompañada de nuevas legislaciones reglamentarias marcadas dentro de la Agenda europea de 2030 que guiará el camino hacia una renovación del Mercado. En este contexto, las empresas se enfrentan a la necesidad de cambio en sus desarrollos para cumplir con las legislaciones y las demandas de un sector en continuo cambio donde la aplicación de las innovaciones tecnológicas en la búsqueda de soluciones sostenibles marcará el éxito de ventas.
¿La legislación en materia cosmética es más exigente ahora? ¿La globalización es un problema adicional en el sentido de tener que cumplir la legislación de diferentes mercados?
Para poder responder a esta pregunta tenemos que conocer la evolución de la industria cosmética en el tiempo, ya que la regulación cosmética ha ido evolucionando con el paso del tiempo y con la demanda de los consumidores, pasando de legislaciones propias de cada Estado Miembro de la Unión Europea a la creación de la Directiva 76/768/CEE que armonizó las regulaciones nacionales sobre cosmética.
Con el paso del tiempo, la creciente demanda de estos productos y las exigencias de los consumidores por adquirir productos que cumplieran ciertos requisitos promovió la aprobación del Reglamento CE 1223/2009 cuya misión era la protección de la salud humana y la simplificación de los procedimientos administrativos para favorecer el mercado interior. No obstante, el continuo crecimiento del sector reclama la necesidad de actualizar el reglamento en base a los nuevos avances del mercado con el fin de garantizar la seguridad y la calidad de los cosméticos desde un punto de vista tanto del consumidor como del planeta.
Respecto al tema de la globalización, actualmente los marcos regulatorios en todo el mundo son similares permitiendo armonizar la regulación cosmética global, aunque se sigue trabajando para conseguir una completa conciliación.
Es por ello por lo que desde AITEX contamos con un departamento de Regulatory que se encarga de la vigilancia del Mercado, para estar al día de los continuos cambios que se puedan generar y dar soporte a las empresas durante la exportación de sus productos.
Una de las problemáticas del momento es la presencia de microplásticos en el sector cosmético, ¿qué opina al respecto?
La problemática de los microplásticos en cosmética considero que es uno de los retos más importantes en la actualidad para las empresas. En la industria cosmética la contribución de la contaminación por microplásticos supone entre un 0,1 % y un 0,4% del total. Pese a parecer poco, su eliminación supone la reducción en los océanos de entre 2.400 a 8.600 toneladas de plásticos anualmente.
Un daño difícil de detectar a simple vista pero que supone potentes efectos adversos debido a su persistencia, capacidad acumulativa y a la toxicidad que presenta, causando daños irreparables tanto en el ecosistema como en el ser humano. No obstante, esta problemática lleva acompañando a las empresas desde 2018 con el Anteproyecto de Ley de Residuos y Suelos Contaminados (APL), siendo que datos de STANPA reflejan que en 2020 la industria ya había eliminado más del 97,6% de las microesferas plásticas en productos que se aclaran. Asimismo, actualmente han surgido nuevas legislaciones por parte de la ECHA que restringe el uso de ingredientes microplásticos incorporados intencionadamente en formulaciones, apareciendo entre otros algunos ingredientes de origen petroquímico ampliamente usados como son el polietileno, polipropileno o los poliacrilatos. Estos ingredientes ejercen múltiples funciones en las formulaciones actuando como microesferas cosméticas, opacificantes, modificadores reológicos…
Desde AITEX, existen múltiples líneas de investigación que se dirigen tanto al control y a la disminución de la generación de microplásticos por las empresas durante sus desarrollos industriales, como a la búsqueda de ingredientes de reemplazo. Por ejemplo, en el proyecto INNATUR desarrollado el año pasado entre las líneas se destaca la investigación del uso de subproductos de la industria agroalimentaria como partículas exfoliantes sustitutas de las microperlas plásticas. Entre otros resultados interesantes se desarrolló una fórmula exfoliante compuesta por partículas de cáscara de coco con eficacia demostrada, mostrándose como una solución innovadora y viable industrialmente.
En la naturaleza existen múltiples recursos por explorar, consolidándose como una fuente rica de materiales multifuncionales donde la sinergia entre los nuevos avances biotecnológicos y el uso de estas materias primas, se presentan como alternativas de alto valor añadido de aplicación en las empresas para adaptarse a las necesidades del Mercado.
¿Por qué cree que estamos viendo un aumento de las reformulaciones cosméticas de productos ya existentes?
Como es de esperar, las nuevas legislaciones emergentes y las necesidades del Mercado suscitan a una renovación constante por parte de las empresas. En los últimos 2 años se han reajustado cerca de 1 de cada 3 productos cosméticos según datos de Stanpa. Como claro ejemplo, se encuentran el reto de sustitución de los productos plásticos. Constituyendo un gran esfuerzo por parte de las empresas de reformulación que refleja el potencial del sector. El cambio de ingredientes implica el desarrollo de un producto casi nuevo con los pasos que esto conlleva: los estudios de estabilidad y compatibilidad, el dosier de seguridad, los estudios de seguridad…
Un desarrollo que puede implicar como mínimo 18 meses de investigación. Siguiendo con la temática de los microplásticos, el coste de sustituirlos en los productos de cosmética es de entre 350.000 y 820.000 euros por producto, según datos de Cosmetics Europe Association. Asimismo, el Mercado Cosmético se encuentra en continuo movimiento con el surgimiento de nuevas tendencias año tras año, que instiga a las empresas a la remodelación continua para no quedarse al margen.
A pesar de ello, las empresas se muestran fuertes ante las complicaciones contando la mayoría con desarrollos de investigación sólidos que los amparan, siendo considerado como uno de los mercados más potentes.
Otra de las nuevas tendencias imperantes en esta búsqueda de la sostenibilidad es el upcycling, ¿cómo se adapta AITEX a ella?
Desde este punto de vista, AITEX se encuentra inmerso en proyectos como la Red Cervera AGROMATTER, donde se están estudiando extractos procedentes de residuos o subproductos agroalimentarios tales como pieles, cáscaras, tallos, hojas... con el fin de obtener activos de alto poder en el sector.
Asimismo, otro de los proyectos destacables es el proyecto INNATUR (IVACE-GVA), focalizado tanto en el proceso de optimización de extracción, como en la formulación natural, aportando productos finales y activos que aportan una segunda vida a los ingredientes de diferentes fuentes naturales. Asimismo, el centro estudia la incorporación de estos activos en sistemas de liberación avanzada con métodos tecnológicos punteros como la electrohilatura y los encapsulados. Finalmente, los productos finales son evaluados tanto in vitro como in vivo, mediante ensayos microbiológicos, con cultivos celulares y con test de usuarios; permitiendo dar una base sólida de eficacia y seguridad de los resultados obtenidos.
Con todo ello, AITEX se presenta para dar soporte a las empresas en todos los puntos de producción amoldándose a las necesidades de los clientes y aportando soluciones a sus retos de una manera innovadora y viable.
Se habla mucho también del refill en los puntos de venta, pero no parece tan fácil implementarlo, ¿es la solución ideal para disminuir la cantidad de packaging o todavía hay que buscar nuevos caminos?
Como fruto de la tendencia de la economía circular, se ha abierto camino a una nueva forma de comercialización mediante el fraccionamiento de los cosméticos. Una solución en línea con la actual política de la Unión Europea de las “3R”: reducir, reciclar y reutilizar envases. No obstante, si no se realiza de forma adecuada, la manipulación producida durante el fraccionamiento y el envasado de estos productos en el punto de venta puede suponer un riesgo para la seguridad de los productos, así como la trazabilidad de los lotes y la recepción de las garantías de información por parte de los consumidores.
El Comité Técnico de Inspección de la Agencia Española de Medicamentos y productos Sanitarios (AEMPS) publicó unas instrucciones de dicho fraccionamiento para garantizar la seguridad y el cumplimiento de la legalidad. Entre los hándicaps más preocupantes se encuentran aspectos como el mantenimiento de la calidad microbiológica, la estabilidad del cosmético y el correcto etiquetado, adicionando un mayor control que puede ser limitante para algunas empresas.
Sin embargo, su aplicación se está abriendo camino en el sector, ante todo en productos sólidos, debido al gran impacto medioambiental y económico que provoca con la reducción de residuos del packaging, y la disminución del coste de producción, consolidándose como una vía prometedora hacia el camino de la sostenibilidad.
¿Y qué opina de la opción de la cosmética recargable?
Como ya se ha comentado con anterioridad, iniciativas como el refill se encuentran en tendencia, debido a su alto carácter sostenible, implicando innovaciones en el packaging y los formatos. Aspectos que vienen acompañados del uso de envases biodegradables y de carácter natural. En Europa la categoría refill de productos ha mostrado un crecimiento exponencial, pasando de representar en 2020 un 11,55% de los lanzamientos, y finalizando el 2022 con un 28,93%, destacando entre las categorías los productos de cosmética de color y cosmética capilar, con los formatos sólidos.
Una iniciativa altamente aceptada por los consumidores con un impacto altamente positivo en el planeta, que se prevé que se expanda a nivel mundial, siendo una oportunidad, cara a las empresas, para adelantarse al Mercado.
Tras la exigencia del consumidor hacia una cosmética más sostenible, a la que la mayoría de la industria se ha apuntado, ahora estamos viendo que el interés se está centrando en la crítica de cualquier tipo de Greenwashing, ¿qué pueden hacer las empresas al respecto?
Para luchar contra las campañas del ``greenwashing´´ ante todo recomendaría a las empresas trabajar con la máxima transparencia y compromiso hacia los consumidores. Los clientes buscan ante todo encontrar la confianza en los productos que compran. Al haber una falta de reglamentación para pautas como el etiquetado o composición de los cosméticos naturales, las empresas también pueden recurrir al uso de certificadoras que aleguen naturalidad de los productos como COSMOS-ECOCERT, siendo un estándar que permite el etiquetado de los productos como naturales o orgánicos; o la norma ISO 16128, que sirve como guía para determinar el porcentaje de naturalidad de los productos.
El Mercado cosmético lucha con un público cada vez más informado e influenciado por las redes sociales, destacando el papel de influencers o youtbers, donde una buena publicidad de la marca juega un rol primordial en el éxito de ventas. Para evitar este tipo de acusaciones, es importante evitar el uso de información confusa como los claims ``libre de tóxicos´´ o ``libre de químicos´´, y emplear una buena campaña que informe al consumidor del porqué de la naturalidad del producto. Mejorando así la percepción de calidad y la lealtad por la marca de los consumidores y, por ende, la rentabilidad de la empresa.
- Otro de los ámbitos de actuación de AITEX es la investigación y la innovación, ¿hasta qué punto puede ser importante para esta labor el creciente desarrollo de la IA?
El crecimiento de la digitalización ha acompañado a todos los sectores y el cosmético no podía ser menos. Los avances tecnológicos ofrecen a los consumidores nuevas experiencias de compra con desarrollos como las experiencias hiperpersonalizadas mediante el empleo de herramientas que descifran las necesidades de cada piel o indican aquellos productos que más se adecuan, facilitando el proceso de compra y la satisfacción del cliente.
Desde este punto de vista, las marcas se convierten en un aliado para los consumidores empatizando con ellos en la búsqueda de su bienestar, siendo una herramienta de alto valor añadido para las empresas. Asimismo, puede emplearse como herramienta para mejorar el desarrollo de los productos, en procesos como la elección de los ingredientes, el análisis de los datos de los consumidores o la automatización de la producción. De esta manera, la inteligencia artificial ha venido para quedarse, dando soporte a las empresas y promoviendo la oferta de experiencias innovadoras a los clientes que mejora la imagen de la marca.
- Innovar, en un sector como el de la belleza, tan sensible a las modas, ¿no es dificultad añadida? ¿Cómo se puede minimizar?
Parte de la riqueza de este mercado se centra en que es un mercado muy innovador donde es necesario estar al corriente de aquellas modas que realmente van a tener un impacto en el mercado. Es por ello, que es importante el estudio constante del mercado para valorar su evolución y ver que es lo que realmente va a impactar con una prospectiva de mínimo 5 años vista.
El coste de llevar a cabo este tipo de estrategias depende del tipo de desarrollo tecnológico que se quiera lanzar. Con una buena base de conocimiento del sector los gastos se convierten en inversiones rentables que dan a conocer tu marca y crecer tu negocio. Asimismo, gracias a ayudas que se gestionan desde AITEX es posible realizar este tipo de innovaciones con subvenciones que lidian el impacto económico y que a su vez se pueden generar en colaboración con otras empresas generando oportunidades de negocio.
- La industria cosmética es una de las más fuertes de nuestro país, ¿cómo ve su futuro?
Actualmente el mercado de la industria cosmética se encuentra en una posición muy ventajosa respecto de otros mercados tras el paso de pandemia, en 2020 no ha tenido un descenso notable. Es un mercado que genera más de 30.000 puestos de trabajo directos en España y solamente en nuestro país mueve un mercado de más de 8.000 millones de euros, si esto se extrapola en diferentes países y a lo largo del tiempo en un mercado al alza y en constante crecimiento por lo que no podría estar en una mejor situación actualmente.
- ¿Y a nivel mundial?
La situación del mercado cosmético español es un reflejo del paradigma mundial. El Mercado presenta una prospectiva de crecimiento cara al 2024 del 3% alcanzando los 105,3 billones de dólares, consolidándose como uno de los motores de la recuperación ante la situación de crisis mundial y la inflación de los precios. Los productos cosméticos son considerados mundialmente como una herramienta indispensable en las rutinas de los consumidores.
A nivel europeo, datos de Stanpa alegan que 7 de cada 10 europeos consideran que los productos cosméticos y de cuidado personal repercuten directamente en su calidad de vida y autoestima. La percepción sentimental de estos productos por los consumidores y la calidad presente en el Mercado, reflejan a un sector altamente competente cuya inversión en innovación es una apuesta segura atendiendo a la robusteza que está presentando en los últimos años.
- Uno de los ámbitos de actuación de AITEX es la de Laboratorio, ¿qué ventajas aporta a las empresas cosméticas?
El área de laboratorios de AITEX es multidisciplinar, pudiendo aplicar todo ese know-how adquirido a lo largo de los años a la industria cosmética aprovechando sinergias de otros sectores. Por otro lado, los laboratorios están dotados con tecnología y equipamiento a la vanguardia, ya que cada año se invierte en nuevo equipamiento atendiendo a las necesidades de las empresas.
Una de las principales ventajas es que se ofrece un servicio global, ya que, al disponer de distintos laboratorios, se pueden realizar desde controles microbiológicos, determinación de sustancias nocivas mediante técnicas instrumentales, ensayos físicos-químicos, ensayos dermatológicos, ensayos de cultivos celulares, envejecimientos climáticos, ensayos de biodegradabilidad, análisis de aguas, análisis de envases, … hasta ensayos hechos a medida en función de las necesidades que puedan tener las empresas para evaluar la seguridad y la eficacia de los productos cosméticos.
Además, los laboratorios trabajan juntamente con el departamento de I+D que dispone de un grupo de investigación específico para el ámbito cosmético, por lo que se van poniendo a punto ensayos a medida que van surgiendo nuevos productos y nuevas reivindicaciones de los mismos.
- A nivel de laboratorio, ¿en qué medida está afectando a la industria cosmética el interés creciente del consumidor por la sostenibilidad? ¿Qué está obligando a cambiar?
Estas nuevas exigencias de los consumidores preocupados cada vez más, por el lado ético y medioambiental de los productos, hacen que aspectos como la innovación y la sostenibilidad adquieran cada vez mayor relevancia en las empresas del sector cosmético.
Este interés se refleja en la realización de ensayos que puedan garantizar que el producto cosmético en todas sus etapas, desde materias primas hasta producto final, es seguro para el consumidor y respetuoso con el medio ambiente. Para ello hay una tendencia, en el uso de ingredientes naturales y en la sustitución de materias primas por otras que no sean contaminantes y que no sean perjudiciales para la salud, sin que para todo ello se pierda la eficacia del producto final. Así como también la sustitución de los envases tradicionales por otros cuya composición sea en base a materiales reciclados y/o reciclables y que puedan ser reutilizables.
Estos ensayos son una herramienta para garantizar: la calidad del producto, la veracidad de los claims tanto en temas de eficacia como de sostenibilidad y la seguridad del producto con el cumplimiento de las normativas aplicables.
- ¿La legislación en materia cosmética es más exigente ahora a la hora de realizar ensayos y tests cosméticos?
Todos los productos en el mercado deben de cumplir con la legislación, con el reglamento europeo nº 1223/2009, el cual se va actualizando a medida que se van estudiando sustancias nocivas y los efectos que estas producen.
Por otro lado, existe el reglamento europeo nº 655/2013 sobre el que se establecen los criterios comunes a los que deben responder las reivindicaciones relativas a los productos cosméticos, y en el cual se establecen unas medidas, entre los cuales además de cumplir con la legislación, se exige la veracidad y un número suficiente de datos para demostrar la efectividad del producto cosmético, las cuales se avalan mediante ensayos de laboratorio y evaluaciones clínicas basados en la calidad, rigor y reproducibilidad de los resultados.